Males necesarios

Se hace imposible conciliar los mundos encontrados, las realidades humanas, los sentimientos aflorados, las sensaciones de los demás.

Hoy me doy cuenta de que soy un extranjero, un extraño que apareció en un mundo en el que todos te miran con miedo, con reticencias. Un mundo en el que muchas veces se mezcla el miedo, con la mera hipocresía social, donde las cosas de los hombres superan a las cosas de Dios, y donde la leyes de los hombres irrumpen contra la realidad cotidiana.

Veo sufrir a mi amor, a causa de los papeles, a causa del tiempo que nos roban, de la angustia de amarse y no poder ser libres para amarse. La he visto trabajar a mi lado, y me he sentido feliz, amado, contento, enamorado. Pero también la he visto sufrir en silencio, las palabras de su familia, que sabía estaban debajo de nuestros encuentros.

La he visto sufrir por muchas cosas, la he visto llorar por sus pensamientos, y la siento en mi interior. Incluso he visto en su ojos el miedo reflejado, miedo que nace de las palabras de otros, de los miedos de otros, de las miserias de otros. Pero al fin, miedo es. Y el miedo unas veces nos hace sentir vivos, pero otras muchas, nos angustia, nos obliga y cercena nuestra voluntad, convirtiéndonos en esclavos de su terror.

Nos esta vedado, a causa de la burocracia.Su amor no tiene parada, no tiene medida, y quiere llenar cada milímetro de mi ser. Pero esto no es posible.

Así pues he tomado una dura decisión, para que su familia, para que ella no sufra más por esta situación terrible.

Me marcho unos días a España, a entregar los papeles, y de paso a quedarme allí hasta que tengan a bien darme el famoso Certificado de Capacidad Matrimonial, que aun tardara casi unos 20 días. Inchallah

Quiero sentir la paz en mi interior, que ella la sienta, y que aquellos que la agobian, sean felices en nuestra espera, aunque lamentablemente, siempre quedará en mi el recuerdo, la amarga sensación, de que para ellos, simplemente soy un extranjero, un extraño.

Te amo Aicha. Por toda la vida te amare.
Inchallah.